Para comenzar considero que hay que tener en cuenta el orden
de los archivos, mantener las cosas ordenadas para luego poder localizarlas
rápidamente es importante. Una manera muy práctica es organizándolas con los
programas de edición, como por ejemplo Lightroom. También pasando manualmente
los archivos desde la memoria a carpetas con los nombres que identifiquen el
material que contienen. Una vez hecho eso, se recomienda formatear la memoria
antes de su próximo uso. Evitar la acumulación de archivos que no sirvan, si es
posible, eliminarlos en el momento para que no se acumulen y luego demande más
tiempo su organización. Hacer copias de seguridad es algo muy importante para
poder resguardar nuestros archivos. Tener todos los archivos sólo en nuestra
computadora implica un gran riesgo ya que podría dañarse, ser invadida por
algún virus… y de pasar algo así, hay
chances de perder todos nuestros archivos. Se pueden grabar en Dvd’s, memorias,
pen drives… pero claro, no todos estos dispositivos tienen la suficiente
capacidad para archivar una gran cantidad de archivos y teniendo en cuenta el
tamaño de, por ejemplo, los archivos RAW, acumularíamos demasiados CD’s o deberíamos
tener varias memorias. Otra opción es la NUBE (Google Drive, Dropbox, Skydrive)
donde también podemos subir nuestros archivos de una manera organizada y descargarlos donde queramos. Otra opción
muy buena son los discos duros externos, ideales cuando se tienen muchos GB de
archivos, ya que poseen capacidades de 500 GB, 1000 GB. Por supuesto que nada
nos asegura que estos dispositivos no tengan alguna falla, es recomendable
tener archivos importantes en dos discos y no tenerlos guardados en el mismo
lugar, previendo eventualidades como un incendio, robo, inundación, etc.… En
cuanto a la licencia, es recomendable utilizar alguna en caso de publicar
fotografías en la web. Una muy práctica y de fácil uso es la de creative commons.
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